Hoy en día, en pleno siglo XXI la gente cada vez se ha vuelto más y más compradora compulsiva lo que ocasiona una gran contaminación en el mundo por la sobreproducción de las empresas, la sobreexplotación de tierras, animales y medio ambiente, el exceso de basura que se genera día con día que ya no hay lugar que alcance, donde se pueda almacenar, recurriendo al mar como otro medio de depósito de basura trayendo un sin fin, de problemas en el ecosistema y el ciclo natural de la vida.
A su vez, las compras que se hacen no son conscientes, al decir no son conscientes, nos referimos a que poca gente compra únicamente lo que se va a necesitar, hablaremos de comida; cuánta gente hay, que realiza compras exageradas de alimentos, mismos, que se caducan porque no alcanzan a ser consumidos y terminan en un bote de basura. Esto es un gran problema porque si la gente fuera realmente consciente de la cantidad que debe de comer, las empresas tampoco tendrían una sobreproducción ya que a menor demanda, menor oferta.
Grandes empresas internacionales, son las que más producen y menos cuidan al medio ambiente y debido a este gran problema, volvió a surgir y a ponerse de moda los alimentos orgánicos y naturales que vienen de granjas que cuidan a los animales y al medio ambiente. Y de estas prácticas sale el consumo local, que su importancia radica en que en lugar de comprar un producto internacional en el super, sustituyas en comprarlo a proveedores locales, proveedores que te aseguran sus procesos de producción y elaboración. El consumir local tiene muchísimos beneficios para la comunidad, los cuales, te mencionamos a continuación:
Michael Porter dice: “Tenemos que entender que lo que es bueno para la comunidad es bueno para los negocios”.
Así que la siguiente vez que vayas a comprar algún producto y sepas que tienes un proveedor o productor local, date la oportunidad de probar el de el y apoya a tu comunidad.
